Durante los últimos años, hemos sido conscientes, cada vez en una mayor medida, de la gran cantidad de edificios en España que han necesitado de una reforma importante a fin de seguir siendo seguros y poder ser utilizados como viviendas, como lugares de ocio o como sedes de empresas. A fin de cuentas, una buena parte de nuestros edificios fue construida hace ya mucho tiempo y solo el paso de los años ya ejerce una influencia bastante grande en lo que tiene que ver con el desgaste de los materiales.
Resulta evidente que esto ha tenido una especial urgencia en lugares como Madrid, en los que la rehabilitación de edificios ya se ha convertido en algo habitual. Pero es una cuestión que ocurre de manera bastante cotidiana en todo tipo de ciudades y municipios de nuestra geografía. Los edificios en nuestro país son bastante más antiguos que los de muchas naciones de Europa y, sorprendentemente, en esas otras naciones se han dado cuenta de la necesidad de rehabilitar antes que nosotros. Aunque algo tarde, nosotros también nos hemos dado cuenta de esa necesidad.
Las administraciones públicas han tenido un papel bastante importante en lo que tiene que ver con la implementación de todo tipo de reformas en las viviendas que conforman nuestras ciudades. Siguiendo las actuaciones de otros gobiernos situados en Europa, se han emitido todo tipo de ayudas en favor de entidades o personas que tuvieran como propósito hacer de un edificio de su propiedad un lugar más seguro o más sostenible desde el punto de vista medio ambiental. La sociedad ha recibido este tipo de ayudas con buenas críticas y la realidad es que esto está ayudando a que se renueven nuestras ciudades de una manera rápida y eficaz.
La página web Certificados Energéticos hablaba de un Plan de Vivienda que se ha implementado desde 2018 hasta el 2021, que es un ejemplo de los asuntos a los que nos venimos refiriendo. En ese periodo de tiempo, son muchas las edificaciones que deben someterse a una rehabilitación a fin de poder seguir siendo habitadas o utilizadas de aquí a las próximas décadas. Y es que es mejor rehabilitar que demoler y volver a construir. Mejor y, además, más barato, que este al final es otro factor que debe servir de apoyo para defender la tesitura que venimos transmitiendo durante todo el artículo.
Una noticia que fue publicada en el diario El País informaba de la llegada de esas nuevas ayudas para viviendas y edificios en general. En concreto, y según se apunta en la entradilla de dicha noticia, esas ayudas se proporcionan si la rehabilitación busca la conservación, la accesibilidad o la eficiencia energética de la vivienda, algo que suele ser habitual pero que debemos promover todavía más en España. No cabe la menor duda de que tenemos margen de mejora. Pero vamos por el camino correcto, sobre todo gracias al trabajo que se ha venido realizando durante los últimos años.
El tejado, el protagonista principal de la mayoría de rehabilitaciones
Son cada día más las rehabilitaciones de edificios que se acometen en el interior de nuestras fronteras y que buscan hacer de un edificio un lugar mucho más seguro. Intrigados por cómo son las rehabilitaciones en nuestro país, nos hemos puesto en contacto con Cubiertas Estévez, una de las entidades que ha venido trabajando en una mayor medida en este sentido durante los últimos años. Lo que nos han comentado sus profesionales es que buena parte de los edificios que han inspeccionado presentaban deficiencias en el techo o el tejado, deficiencias que, en el caso de no ser tratadas, podían comenzar a provocar problemas graves más pronto que tarde.
No hay que perder de vista que todavía son muchas las rehabilitaciones que hay que hacer para garantizar que cada uno de los edificios de nuestras ciudades es seguro y cumple con todas las normativas vigentes. Desde luego, es ineludible que, a medida que pasen los años, serán más y más los edificios que tengan la necesidad de reformar alguna de sus partes. El boom de la construcción que tuvimos durante los años 70 va a provocar que, ahora que se cumplen 50 años de la construcción de muchos edificios, sea necesario ejecutar reparaciones en muchos de ellos.
Finalmente, nos gustaría destacar el impacto tan positivo que está generando todo lo que tiene que ver con la rehabilitación de edificios en el sector de la construcción, que se encontraba en bancarrota con la llegada de la crisis económica en el año 2007. Gracias a este tipo de trabajos y reformas, el sector ha reflotado de una manera bastante importante y ahora vuelve a recuperar ese esplendor que había perdido pero que siempre soñó con recuperar. Para nuestro país, desde luego, todo lo que tenga que ver con rehabilitar tiene mucho de ventaja y nada de inconveniente.